¿Cómo se contrae la leishmaniosis?

La leishmaniosis se contrae cuando un mosquito flebótomo infectado pica al perro, transmitiéndole el parásito. Estos mosquitos suelen estar activos durante la noche y al amanecer, por lo que la exposición a estas horas aumenta el riesgo de infección. Es importante destacar que los perros infectados no pueden transmitir la enfermedad directamente a otros perros o personas; el parásito solo se contagia a través de la picadura del mosquito.

Síntomas de la leishmaniosis en perros

La leishmaniosis puede presentar una variedad de síntomas, que pueden aparecer semanas o incluso meses después de la infección. Los síntomas se dividen en dos categorías: cutáneos y sistémicos.

1. Síntomas cutáneos:
   • Pérdida de pelo, especialmente alrededor de los ojos, formando lo que se llama un «aspecto de gafas»
   • Lesiones en la piel, que pueden ser úlceras o zonas de piel seca y descamada
   • Fragilidad y crecimiento excesivo de las uñas
2. Síntomas sistémicos:
   • Pérdida de peso y falta de apetito
   • Letargo y debilidad general
   • Fiebre intermitente
   • Inflamación en los ganglios linfáticos, especialmente en el cuello y en la zona inguinal
   • Problemas renales, que en casos avanzados pueden ser graves y poner en riesgo la vida del animal
   • Otros síntomas como diarrea, vómitos, y sangrado nasal

Diagnóstico de la leishmaniosis

El diagnóstico se realiza generalmente mediante pruebas de sangre para detectar anticuerpos contra el parásito o por pruebas PCR, que buscan el material genético del parásito. En casos avanzados, también se pueden realizar análisis de riñón y de hígado para evaluar el estado de salud del perro.

Prevención de la leishmaniosis

La prevención es crucial, ya que el tratamiento puede ser complicado y costoso. Las medidas preventivas incluyen:

1. Vacunación: Existen vacunas que, aunque no eliminan el riesgo completamente, ayudan a reducir la probabilidad de infección y, en caso de que ocurra, a mitigar la gravedad de los síntomas.
2. Collares repelentes y pipetas: Existen productos específicos que protegen contra las picaduras de los mosquitos flebótomos. Estos deben aplicarse de manera regular y de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
3. Control del entorno: Evitar que el perro esté al aire libre durante las horas de actividad de los mosquitos (tarde y noche), especialmente en áreas donde la enfermedad es común.
4. Uso de insecticidas: Utilizar insecticidas en casa o en el área donde vive el perro también puede ayudar a reducir la presencia de mosquitos.

Tratamiento

Si un perro resulta positivo para leishmaniosis, el tratamiento dependerá de la etapa en la que se haya diagnosticado y de la gravedad de los síntomas. Aunque la enfermedad no tiene cura definitiva, se pueden administrar medicamentos antiparasitarios y moduladores del sistema inmunológico para controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del perro. En casos graves, el tratamiento debe incluir apoyo renal y hepático debido a las complicaciones sistémicas que puede provocar la enfermedad.

En resumen, la leishmaniosis es una enfermedad seria que requiere un enfoque preventivo y un manejo adecuado si se diagnostica. Con un plan de prevención efectivo y la detección temprana, el pronóstico y la calidad de vida del perro pueden mejorar considerablemente.

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